Presidente Trump: Misión “La Luna”, ¡no! Misión: “ ¡la Tierra!”

Monday, December 18, 2017

“El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado que volverá a enviar astronautas a la Luna 45 años después. El objetivo de regresar a la Luna supone un giro en la política espacial estadounidense… Esta decisión de Trump, una vez más, es reprobada internacionalmente y goza de una baja popularidad en Estados Unidos (Diario Público)”… 

Detrás de esta nueva “ocurrencia” del Presidente Trump están inmensas cantidades de dinero que se invertirán en hacer posible este ambicioso proyecto… ¡Si en lugar de llegar a la Luna llegásemos a los que padecen sida, malaria, lepra, Alzheimer, cáncer, hambre, frío...; a los que sufren las consecuencias de catástrofes naturales o provocadas…! Las urgentes necesidades en materia de salud, nutrición, justicia, educación... de la mayor parte de las personas se postergarán una vez más y quedarán supeditadas al brillo de un gobierno y de quienes, en su propio país o fuera de él, no alcanzan a ver, deslumbrados por luminarias fugaces, las consecuencias de no mirar alrededor y hacia delante. Y de no mirar atrás y aprender las lecciones del pasado. 

Si Estados Unidos en lugar de conocer mejor la Luna conociera mejor las Naciones Unidas, que están en la misma isla de Manhattan, y lideraran – como hicieron en 1945 – el establecimiento de este marco ético -jurídico que con tanto apremio necesita hoy la humanidad, integrando en el Sistema de las Naciones Unidas el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial (“de la reconstrucción y el desarrollo”, por cierto), la Organización Mundial del Comercio... Si decidieran adherirse sin más demora al Tribunal Penal Internacional; y de esta forma, se dieran cuenta de inmediato que la justicia a escala mundial requiere una particularísima atención: tráficos de toda índole, transgresores en la mayor impunidad, para los que causan un deterioro a veces irreversible del medio ambiente, para los que practican la “contabilidad creativa”... Si decidieran continuar en la UNESCO… 

La mayoría de los habitantes de la Tierra aguardan aún que desde el barrio de la abundancia de la aldea global se de la ansiada orden de “Misión, la Tierra”. Pero, desgraciadamente, una vez más, no será así. Como ciudadano del mundo conozco los desafíos mucho más perentorios para las condiciones de vida de la especie humana que quedarán desatendidos. He tenido ocasión de conocer de cerca muchos de los rincones del planeta y admirar la grandeza creadora que anida en la infinita diversidad de sus habitantes, y he procurado contribuir a aliviar la situación en que viven (y mueren) tantos habitantes de la Tierra, que esperaban todavía que los pueblos más prósperos volvieran, por fin, los ojos hacia ellos. 

Mirar hacia arriba no es lo difícil. Lo difícil es contemplar los grandes problemas de la Tierra en estos principios de siglo y de milenio y reconocer el fracaso de las fórmulas aplicadas hasta ahora para hacer frente a un buen número de ellos. En lugar de mirar hacia la Luna habría que volver la vista hacia los países explotados y recelosos por tantas promesas incumplidas. Enviar expediciones a países donde viven – sobreviven – miles de millones de personas. Sólo de esta manera los Estados Unidos figurarían en la historia como el imperio que supo protagonizar la inflexión desde una cultura de fuerza a una cultura de conciliación, de convivencia, de paz. Esta sería la mejor “misión” que pueden realizar, la que el pueblo americano se merece. Todos al lado de la vida... en la Tierra. Este sería el liderazgo. 

Es urgente reducir, hasta eliminarlos, los caldos de cultivo de miseria, de exclusión, de explotación, de dependencia, donde se genera la frustración, la radicalización, la desesperanza, la violencia. Remediar los desgarros, prevenirlos. Es urgente modificar unas pautas económicas que han ampliado, en lugar de estrechar, la brecha que separa a los ricos de los pobres. Y aprender a dar idéntico valor a las vidas – y a las muertes – de todos los seres humanos, “iguales en dignidad”. 

Todos aplaudiríamos una “Misión, la Tierra” que descubriera y eliminara las redes de narcotraficantes (¡empezando por los de arriba!), la compra–venta ilegal de armas, los paraísos fiscales (que son una vergüenza consentida, una realidad sobre la que se hace la “vista gorda”), las mafias y el extremismo. Millones de personas reconocerían la actuación de quienes de esta forma mejoraran su bienestar.

Ahora, al contemplar la Tierra en su conjunto, nos damos cuenta de la grave irresponsabilidad que supuso transferir al mercado los deberes políticos que, guiados por ideales y principios éticos, podrían conducir a la gobernanza democrática. Al observar la degradación del medio ambiente - del aire, del mar, del suelo -; la uniformización progresiva de las culturas, cuya diversidad es nuestra riqueza (estar unidos por unos valores universales es nuestra fuerza); la erosión de muchos aspectos relevantes del escenario democrático que con denodados esfuerzos construimos... nos parece más inesperada e inadmisible la ausencia de reacción de instituciones y personas, la resignación, la sumisión, el distraimiento de tantos. ¿Cómo es posible? En muchos de estos países, empezando por los propios Estados Unidos, es innegable la irrestricta libertad de expresión. Todos pueden decir lo que quieran... pero con frecuencia los medios de comunicación de mayor difusión seleccionan las noticias y las presentan de tal modo que se favorece el pensamiento único, la aceptación de lo que sucede (de lo que dicen que sucede) y de la forma en que los gobiernos así auto-halagados abordan los problemas. 

Debemos apostar por un “Proyecto Tierra” y así, si en lugar de invertir en prestigio hoy hacerlo en el porvenir de los habitantes del planeta. 

Los Estados Unidos son un crisol de culturas. Ha sido tierra de acogida y ha sabido – y sabe todavía – atraer a talentos de todo el mundo, lo que le confiere una extraordinaria fuerza creadora. Todos los países deberían unirse para llevar a cabo unos programas espaciales siempre y cuando ello no impidiera ni menoscabara la gran prioridad que representan los seres vivos y, en primer lugar, los seres humanos que ya existen sobre la Tierra. 

Estamos ante gravísimas amenazas a la habitabilidad de la Tierra y son precisas acciones decididas con firmeza y a tiempo. Mirar en estos momentos tan sombríos hacia la Luna puede situar a Estados Unidos, indebidamente, muy lejos del corazón de la mayoría de los ciudadanos del mundo. Que no se aleje más. Para ello bastaría con que se tuviera la visión y el coraje de proclamar: “¡Misión: la Tierra!”.

CATALUNYA: it is never too late for gathering

Monday, December 11, 2017

It is never too late for gathering and to tackle the problems with serenity because otherwise, in the case that a timely solution is not found, can lead to undesirable situations for everyone.

As I have emphasized repeatedly in regard to the facts in Catalonia, I consider it is essential and urgent that a meeting of representatives of both parties takes place without conditions or a priori, addressing the different aspects of the conflict with serenity and high perspective, reaching conclusions that allow preventing the serious consequences that could arise.


As a former Director General of UNESCO, President of the Foundation for a Culture of Peace and co-President of the University Institute for Human Rights, Democracy and Culture of Peace and Nonviolence (DEMOSPAZ), I wish to join my voice to those who seek, from different national and international organizations, adequately resolving an issue that concerns and challenges us all.

THE UNITED STATES OF TRUMP WITHDRAWS FROM UNESCO

The Israel of Netanyahu follows them as well. It was expected. When Yitzhak Rabin ruled, Israel was very active in UNESCO, the intellectual Organization of the multilateral democratic System of the United Nations. But he died assassinated and, since then, the chances of success in the peace process are vanishing.

The United States withdraws from UNESCO because the Republican Party, with hegemonic ambitions, is incompatible with a multilateral democratic system. Already in 1919, they did unachievable the activities of an efficient League of Nations because they imposed the immense contradiction that the United States were never members of the League of Nations! created by an American President, Woodrow Wilson.

And then they have always been hostile to the excellent design of the United Nations System created by the Democratic President, Franklin D. Roosevelt...

In the 80s, at the end of the "Cold War", when was finally possible to empower the necessary expansiveness, perspective and efficiency to multilateralism, providing it with proper personal, security, technical and financial resources, President Reagan with the Prime Minister Margaret Thatcher as an obedient acolyte, left UNESCO and created the plutocratic groups (G6, G7, G8 ...) set up by the richest countries, to marginalize the United Nations, not subscribing the Convention on Human Rights of Children in 1989 -it is the only country in the world that has not subscribed it-, placing the World Trade Organization directly outside the System ... and then invading Iraq without the authorization of the Security Council ... And the neoliberalism has resulted as well in the decrease of the Aid for Development increasing the number of emigrants because in their countries of origin they die of hunger. It is an intolerable fact, from all points of view, that each day more than 4 billion dollars are invested in military expenditures and armament, while thousands of people, most of them children from 1 to 5 years old, die of starvation and abandonment.

This daily colossal contribution to the economy of war has seemed scarce to President Trump, who requested an increase very quickly. And the European countries, including Spain, all of them unsupportive with the immigrants and refugees -more than 6,000 dead in the Mediterranean in 2016- rushed to increase their defense investments. And all have been silent when Trump has announced that he would not implement the Paris Agreements on Climate Change, which constitutes an intolerable threat to the quality of the Earth habitability and, therefore, to the intergenerational legacy.

I regret they leave UNESCO because millions of American children and young people will receive a biased education -in some Republican States it is obligatory to explain creationism!- typical of an educational scheme that confuses education ("being free and responsible") with training, knowledge with information and information with news. And I especially regret for Higher Education, as it is well known that the US has 2 dozen top universities... but with hundreds of universities that leave much to be desired because, among other things, education is confused with professional learning.

It is necessary that world citizens react quickly -tomorrow may be too late- demanding compliance by the United States with the Paris Agreements on Climate Change and the Sustainable Development Goals. Otherwise, it must be a great popular outcry -now that we have no excuse to keep an accomplice silence- which, aware that otherwise all humanity would suffer the consequences, requires President Trump to redress.The convinced supremacist, does not conceive that all human beings are equal in dignity and that no one can irreversibly tarnish their future. It is obvious that what worries me is not that the United States withdraws UNESCO again, but that the world as a whole, without the assistance of a strong and effective United Nations, abandons itself to its fate... especially when we know most certainly that points of no return can be reached.

What does the European Union refrain of telling clearly to President Trump that their trade relations could be affected very severely if he does not comply with the Paris Agreements? What do the most concerned citizens to wait, looking to the eyes of their children and descendants, to say that they will not admit that their intergenerational legacy deteriorates?


Now we can express ourselves: crime of silence.